El Tiempo...

Transcurría el tiempo en silencio  con la única variante de los tremendos líos que armaba y en encabezaba mi hermano.

La casa tenia dos piezas con enormes techos,una cocina y un baño, y todas sus aberturas tanto ventanas como puertas daban al único patio que nos comunicaba mediante una  escalera a la habitación del altillo donde ya se había instalado mi tía ese era el lugar mas copado,pero no me permitían entrar,claro!! era privado!!

Con el final del año lectivo se empezó a complicar la cosa y mi mama` no tubo mejor idea que mandarnos de vacaciones a la casa de mis abuelos en Villa Soriano.

Al principio parecía buena la idea de pasar tiempo ahí en ese lugar que poco conocía,la que seguramente se sentía como en casa era mi hermana mayor,ya que a ella la criaron mis abuelos hasta que tubo el accidente en el colegio(se cayó de arriba de unos tablones adentro de un tanque quebrándose la pierna).

Llegado el momento todo mi ser era ansias de llegar ya que el viaje había sido largo,primero en tren hasta Mercedes y luego un micro de un tal Bonilla nos esperaba para así comenzar el camino que nos llevaría a la villa.Después de tantos kilómetros llenos de polvareda y calor,por fin bajamos en una esquina,en donde no había nada y teníamos que caminar dos o tres cuadras que se me hicieron interminables.Lo peculiar del caso es que a mi abuelo,todo el que pasaba con una veña de sombrero,lo saludaban con mucho respeto"adiós Don Mario"decían...eso me hacia sentir importante y pro tejida,no se de que ni de quien,pero así me sentía,en un mundo por descubrir,que aparentaba ser divertido pero que después no me resultaría tan así...

El Tiempo...

En fin los días en la Villa transcurrían entre,siestas,juegos,travesuras,y muchas cosas mas...Mis abuelos no eran malos,pero si muy rigurosos,todo tenia que tener un horario y la verdad lo que mas me molestaba era tener que dormir siesta(que obviamente en todo pueblo era rigurosa!!!jaja).El silencio te agobiaba mas que el calor de  la tarde!!!

El Tiempo...

Transcurrian los dias silenciosos y lo mas lindo de ellos eran mis escapadas a la casa de mis tios.

Un nuevo Hogar.

Estrenábamos casa,mi tía china, mama y yo.Después de haber vivido en ese caserón con mis tíos y primos,me sentía perdida,y no me importaba que mi mama quisiera rehacer su vida como decía,yo extrañaba y cada vez que podía me volvía caminando a lo de mis tíos.así todos los días hasta que no recuerdo cuando,ni como mi mama tenia pareja,había traído a mi hermano a vivir del todo con nosotros,pero ahí no terminaban las sorpresas,una tarde mientras jugaba en el patio interior de la casa,me quede petrificada cuando vi entrar por el pasillo que conducía al portón que daba a la calle,a una niña mas grande que yo,y que mi hermano,lo peculiar era que rengueaba suavemente y estaba acompañada de mi abuelo.

Bueno!!!bueno....se agrandaba la familia,es increíble como en menos de un año te cambia el rumbo de tu vida.Lo que para los demás parecía bueno y normal que se hiciera ,para mi era un tormento,en el que nadie se paro a preguntarme que era lo que pensaba o sentía.La cuestión del caso es que de ser la mascota de la casa ,en donde todos ponían atención a mi persona,pase a vivir en otro lugar con mi mama,mi tía China( hermana de mi mama) y dos hermanos,que no conocía,y para aderezo del plato,mi mama se puso en pareja,y comencé a escuchar por primera vez,la palabra:PADRASTRO.

Había un movimiento diferente a lo habitual,( eceptuando los días en que llegaba mi Tío-padrino,de estar embarcado.El pasaba meses sin venir y cuando llegaba era una algarabía)no se, no entendía muy bien que sucedía,pero había cajas por todos lados,y cosas que sacaban y ponían.
En fin yo jugaba en la casa de mi amiga Julia(la vecinita de al lado,que con solo cruzar el muro de unos setenta centímetros mas o menos,ya estábamos una del lado de la otra)que en los fondos de la misma,se encontraba una habitación,en donde había un mundo de cosas raras colgadas,pero nosotras nos hacíamos espacio para sentarnos en unas pequeñas sillas de mimbres y jugar a que tomábamos el te mientras,charlábamos de las cosas que escuchábamos de los grandes,(por unos momentos convertíamos ese espacio en un mundo de fantasía y verdades,que con el tiempo y al recordarlas comenzamos a encajar las piezas que en su momento no comprendiamos).
Llego el fin de semana,y con El la noticia de que nos mudábamos,así que comenzaron a cargar las cosas mas pesadas en una vieja carretilla,y suavemente  comenzamos la marcha hacia la nueva casa,que se encontraba a unas veinte cuadras de ahí.Cansadas por todo el trajín de idas y vueltas varias veces con paquetes y bolsas en las manos.,se hizo la noche y nos dispusimos a dormir en unos colchones tirados en el piso,con una vela encendida,esperando que al otro dia despertara y me diera cuenta que solo habia sido un mal sueño.